Alborozada oposición

Celebradísima ha sido la designación del candidato socialista a la Alcaldía de Almería, José Antonio Amate, actual presidente de la Autoridad Portuaria y ex... bueno... ex muchas cosas.

Celebradísima sí, pero no precisamente por el grupo municipal socialista que, visto lo visto, no ha derrochado alegría ni alborozo al oficializar el BOES (boletín oficial del entorno socialista) el persistente rumor de los últimos seis meses.

No hay “alborozo” de primera, pero sí de segunda. Y es que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua lo define en primera acepción como “Extraordinario regocijo, placer o alegría”, y en segunda como “Extraordinario desorden”. Es lo que tiene.

Como los hay que saben nadar entre dos aguas, que saben agarrarse a un sillón como lapa a la roca, que hacen piña como los mejillones, es cierto que alguno ha respirado aliviado, confiado en volver a ir en la candidatura y cobrar otros cuatro años más (si tiene suerte seguirá en la oposición, y así tampoco tiene que complicarse más la vida... que ya tuvo bastante).Otros se están tentando la ropa desde entonces, mirando a un lado y a otro a ver por donde van a venir los vientos.

Vamos a asistir a una auténtica carrera de lucimiento ante el nuevo futuro jefe, con el desorden lógico de quienes no tiene muy claro hasta que punto han de hacer méritos ante él, o ante el actual.

Vamos a asistir a esa bicefalia tan del gusto socialista (¿se acuerdan de González y Guerra, Borrell y Almunia?... hace tanto de aquello...) con el condicionante de que aún queda un año para las elecciones municipales, y de que en el resto de plenos que haya hasta entonces habrá que preguntarle al portavoz socialista Martín Soler “¿y su candidato piensa lo mismo, o si gana apoyará esto a lo que usted hoy se opone?”.Alborozo, alborozo, mucho alborozo.