12.9.06

Que luego va y lo casca

¿Papeles a María Eulalia Montoya? No, hombre, no, que luego ya sabemos como acaba todo eso, que luego va y lo casca por ahí en una rueda de prensa; y no tiene porqué enterarse todo el mundo de los negocios que tenemos y de quienes son nuestros amigos. No hombre no. Flataría más.Que María Eulalia Montoya es una mujer polémica, es algo que se resume en su trayectoria política a lo largo de estos último años en la Corporación de Níjar. Comenzó como concejala del PICN tras unas infructuosas negociaciones con el PP, pero una vez en el Ayuntamiento pactó con los populares pemitiendo a Antonio Jesús Rodríguez ser alcalde. Protagonizó la ruptura de su formación llegando el tema a los tribunales. Posteriormente favoreció la moción de censura que puso al socialista Joaquín García al frente del Consistorio. Ella dijo no iba a tener ningún cargo, pero al poco ya formaba parte del equipo de Gobierno. Desde entonces no ha dejado de denunciar corrupciones y corruptelas de su alcalde, hasta que éste, lógicamente se la tuvo que quitar de en medio por falta de confianza. Por cierto, que cuando dejó de apoyar al PP no habló de corrupciones ni nada parecido, sencillamente cambió su voto y listo.Hay quien vió en su afán de fustigar al gobierno de García un intento de lavar su imagen de cara a las próximas elecciones municipales, en las que podría encabezar la candidatura del PAL (el PdAL, como insistentemente me corrige un lector del blog).El caso -y es el dato- es que Montoya se ha encerrado en el Ayuntamiento de Níjar porque el alcalde le niega una información, lo cual entenemos porque claro, luego llega esta concejala, ata cabos y deja al descubierto los peculiares socios del alcalde y sus particulares negocios mientras el pueblo sigue sin tener ni agua potable (sólo la Villa de Níjar la tiene, la del resto del municipio no lo es, según los propios informes municipales).

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa es la ventaja y el inconveniente de la independencia. Una concejala incómoda no le interesa a nadie que gobierne. Supongo que esta señora habrá tenido tiempo de arrepentirse de haber colocado en la alcaldía, al impresentable barrigudo socialista que lleva chupando del bote una panzá de años, en los que el término municipal de Níjar no acaba de levantar cabeza.

Anónimo dijo...

Lo que digo es que María Eulalia es un grano en el pompis tanto de este alcalde como el del que venga. Yo creo que a esta doctora lo que le interesa es tocar poder.A lo mejor logra curar los males que asolan Níjar. De lo que no estoy tan seguro es de si será la mejor candidata para ocupar el puesto de alcaldesa. Creo que le falta credibilidad y no le va a resultar fácil convencer a los vecinos para que la voten.

Joaquín lleva muchos años gobernando en Níjar y tanto él como su partido deberían plantearse ya buscarle un relevo.

La lógica democrática aconseja este cambio, porque se está perpetuando en el poder y eso no es bueno. Se necesitan caras nuevas en Níjar, gente con ilusión, preparada y muchas ganas de trabajar por el pueblo, no para sí, que es lo que suelen hacer la mayoría de los políticos de tres al cuarto, que en Almería hay muchos.

Da la sensación de que Joaquín ha nacido para ser alcalde de Níjar. ¿Es que no hay nadie que esté capacitado en su partido para darle el relevo ya?.

También hay que reconocer que lo de este hombre tiene mérito, porque ha ganado buena parte de las elecciones a las que se ha presentado, lo cual indica que cuenta con el apoyo del pueblo, y eso es importante. Digo yo que los nijareños sabrán a quién tienen de alcalde y por qué no se decantan por otro candidato.

Me temo que Antonio Jesús Rodríguez va a tener que trabajar muy duro en las próximas elecciones si quiere destronar definitivamente a Joaquín, o a su sucesor o sucesora.

Anónimo dijo...

Cuanto menor es el nivel socio-cultural y económico, más fácil lo tiene el PSOE para ganar, pero en cuanto un municipio empieza a levantar cabeza, lo más seguro es que prefieran la mayor solvencia (en teoría) que tiene un equipo de gobierno del P.P. para gestionar los problemas municipales.