Se queja Andrés Góngora, secretario provincial de COAG del secretismo que existe a distintos niveles de la producción y comercialización, lo que dificulta enormemente la evaluación de la situación real del sector agrario.Si eso lo dice un productor, que además está al frente de una organización tan relevante como lo es COAG, cabe preguntarse cual es el motivo de tanta ocultación de datos, y lo que es más interesante, cabe preguntarse hasta qué punto son ciertos los datos que él mismo ofrecía en su reciente comparecencia ante la prensa.Recuerdo que hace unos años se montó casi una revolución -con asalto a la Diputación incluido- porque los agricultores decían estar ahogados por las deudas, habida cuenta de lo mal que iban las cosas. Pues bien, el entonces subdelegado del Gobierno, Francisco Laínez, se interesó por el tema y preguntó, y la respuesta fue unánime: la posible deuda relacionada con créditos agrarios era ínfima. Debía ser así, porque tras aquello no se volvió a hablar del asunto, y mira que corrieron ríos de tinta.Si realmente la agricultura fuera tan mal como algunos se empeñan en decir, hace tiempo que esta provincia habría comenzado a flojear, pero el precio de la tierra sigue subiendo -hace unas semanas publicamos unos datos al respecto- y cada vez son más los terrenos invernados y los montes allanados (saltándose la ley), y además se baten record en afiliaciones a la Seguridad Social (lo que quiere decir que el ritmo de contrataciones es alto), y la venta de bienes tales como vehículos de gama alta sigue al alza, por poner sólo unos pequeños ejemplos de una realidad cotidiana.Los desfases entre las cifras que ofrece la Administración andaluza al cierre de cada campaña, contrasta con los llantos de las organizaciones, y eso tiene que ser por algo. Por cierto ¿cuantos inspectores tiene Hacienda en Almería?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Entradas
1 comentario:
Si, estos nada mas que quejarse, pero eso, buenos coches caros, inmigrantes por un tubo, bajos sueldos a los españoles, muchas prostitutas y luego a lloarar para que les den mas subvenciones, y claro como COAG es adicta al regimen, pues no pasa nada, se le dan las subvenciones que salen del bolsillo de todos, y ellos tan contentos, a pasear putas de lujo en coches de lujo, mientras nos llenan el pais de inmigrantes, que hacen que baje el sueldo a los españoles y que los españoles se queden sin trabajo. Asi hasta que reviente el asunto y venga un Lepen español.
Publicar un comentario